jueves, 1 de octubre de 2015

Muchas gracias a todos, en nombre de Sergio,


Muchas gracias a todos, en nombre de Sergio, por tan cariñosas y sinceras felicitaciones por su 22 cumpleaños, en su nombre, y en nombre de toda la familia León Verde. Por ello, y para celebrarlo comparto aquí uno de los poemas de "El hijo roto" arreglado para la ocasión.
Graciás, de corazón. Que paséis un fantástico día.

Decíamos ayer que, un día de estos, compartiríamos algún que otro poema. Ayer 30 de septiembre, Sergio, mi hijo roto, mi niño, mi ángel, mi bebote grande, cumplió 22 primaveras. Muy atrás quedó esa "fecha de caducidad vital" que le otorgaron los médicos del hospital. Ayer celebramos su cumpleaños "con honores y salvas" de feliz bienvenida. Sergio sigue un año más a nuestro lado. Un aniversario que merece la pena compartir y celebrar con todos vosotros con esta "Oda a su 22 cumpleaños". Este, si es un poema del libro, recompuesto, aquí, para tan solemne y emotiva celebración familiar.

Mi niño, mi ángel, mi guía:
veintidós años cumpliste,
¡Y aquel día tan distante
En que anduviste adelante!
Mi niño, mi ángel, mi bebote grande.

A las sombras engañaste,
superaste aquel instante,
y las sombras se quedaron,
sólo en tus ojitos grandes…
Mi niño, mi ángel, mi bebote grande.

Pero no penas por ello,
pues conseguiste quedarte
en este Mundo tan bello…
Mi niño, mi ángel.
Mi bebote grande.

Quizá no andes, no hables,
pero solo tu sonrisa,
y tu corazón tan noble,
llenan toda nuestra vida…
Mi niño, mi ángel, mi guía.

Aunque esfuerzo y trabajo arduo
se criarte día a día,
satisfechos te cuidamos
solo por ver tu alegría…
Mi niño, mi ángel, mi guía.

Y tus ojitos nos buscan
por medio de tus oídos,
y tus manos acarician
leyendo con tus sentidos,
nuestro amor, y mil cariños,
de estos padres que te adoran.

¡Feliz día vida mía!
¡Vive cien años contento!
Que tus padres te cobijan.
Mi niño, mi ángel, mi guía,
Mi singular compañía.

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