La unión provincial Upapsa hace un llamamiento urgente para no suprimir las salidas previstas en Semana Santa al reclutar solo a la tercera parte
El voluntariado vive una crisis sin precedentes y está afectando, y de modo muy serio, a una de las entidades que más acciones desarrolla a lo largo y ancho de la provincia en favor del colectivo de discapacitados intelectuales, la unión provincial de asociaciones Upapsa. Tanto es así que esta entidad que preside Alicia Fontanillo pone en riesgo certero los programas de vacaciones que benefician a unas 700 personas, unas 170 de ellas en las próximas fiestas de Semana Santa.
La voz de alerta la emitió ayer la gerente de Upapsa, Mari Luz Arbolí: «No sabemos qué pasa, pero de repente ya no hay voluntarios para que nosotros podamos llevar adelante los programas de estancias vacacionales». La Comunitat Valenciana es una de las pioneras y de las pocas que tienen este tipo de programas parcialmente subvencionados por la Conselleria de Bienestar Social, pero este año se encuentra con el problema de la ausencia de voluntarios, que son los que comparten sus vacaciones con los discapacitados intelectuales y son su apoyo para comer, vestirse o asearse, si lo necesitan.
«Desde el verano pasado que ha caído el voluntariado en Upapsa y en otros organismos u ONG y no sabemos muy bien por qué, aunque va por rachas. Tanto es así que necesitamos 78 voluntarios para los programas vacacionales de los 700 discapacitados síquicos y solo hemos logrado reclutar para todo el año a unos treinta», subraya Arbolí. Upapsa se está planteando suprimir las estancias de Semana Santa, que empezarían dentro de solo veinte días, ya que aún tiene que ofrecerse gente y realizarles charlas formativas y una preselección.
Arbolí indica que durante el pasado año se beneficiaron 668 personas de estos programas en la provincia con viajes a Benicarló, Teulada, Puerto de Mazarrón, Madrid, Cullera, Oviedo o Cartagena. Lagoas de Covadonga, Castillo de Papa Luna, estadio Santiago Bernabeu, pesca en Roquetas de Mar o balneario de Mula. Algunas de las actividades que penden de un hilo, no solo en Semana Santa sino también en verano y en Navidad, si Upapsa no logra reclutar a 279 voluntarios, como mínimo. «Personas que decidieron vivir otro tipo de vacaciones y dedicar parte de su tiempo libre a un acto solidario y humano», añade.
Los viajes que más peligran ahora mismo son los de Murcia, San Pedro del Pinatar, Calella y Moraira. Para ello son necesarios 78 voluntarios y solo se han presentado formalmente ante Upapsa unos treinta a día de hoy.
«No entendemos muy bien lo que pasa, porque en otras épocas incluso hubo lista de espera, pero si no lo remedian las personas solidarias vamos a tener que suspender ya el plan de Semana Santa», advierte.
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