´El Consell usa a centros de discapacitados como cajeros del copago´

EU califica de "auténtica aberración" que los centros cobren el copago impuesto por la Generalitat

08.01.2014 | 12:20

EP | LEVANTE-EMV.COM La diputada autonómica de EUPV Esther López Barceló ha acusado al Consell de "utilizar" a los centros de discapacitados "como cajeros del copago" y ha exigido nuevamente la retirada del decreto que "establece el copago" desde el pasado 1 de enero.

En un comunicado, tilda de "auténtica aberración" la medida aplicada por el Gobierno valenciano, por la que los centros de discapacitados "serán los que cobren el copago a los usuarios".

López Barceló mantiene que se trata de "una medida más del desmantelamiento planificado que lleva a cabo el Consell sobre los recursos de los servicios sociales" y augura "consecuencias" como el "cierre de centros, desocupación de profesionales y el retorno a un estado de beneficiencia más propio del franquismo que del siglo XXI".

Según la parlamentaria, en verano ya denunció "la intención de la Conselleria de Bienestar Social de aplicar este año este copago", una iniciativa que "pasó un poco desapercibida" y que EUPV intentó "impedir que prosperara" mediante una Proposición No de Ley. Ahora también exige una comparecencia de la consellera sobre este tema.

La consellera "tendrá que dar explicaciones"
Al respecto, subraya que Asunción Sánchez Zaplana "tendrá que dar explicaciones de cómo piensa aplicar una de las medidas más crueles y drásticas" en materia de derechos sociales y advierte que "tendrá unas consecuencias fatales en miles de personas y familias del País Valenciano" al obligarles a "elegir entre poder llegar a final de mes o permitirse el acceso a la garantía de sus derechos fundamentales".

Además, López Barceló subraya que las "cartas de copago" fueron recibidas "justo después" de las movilizaciones en las que los centros de atención a la discapacidad "reivindicaban precisamente el cobro de las subvenciones que no se les había pagado".

Así, reprocha a Bienestar Social que envió esa comunicación "posteriormente y sin ningún tipo de información a los usuarios", en lo que considera "un último gesto de crueldad".