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Extracto de la carta remitida por la Junta a los ayuntamientos anunciándoles que deben reducir su plantilla de servicios sociales básicos.
El Colegio Oficial de Trabajo Social ha denunciado públicamente que el Gobierno regional pretende en 2014 "terminar casi literalmente con la red básica de atención en la comunidad autónoma y así cumplir con el mandato encomendado por Cospedal de desmontar, destruir o desmantelar los servicios sociales de Castilla- La Mancha".
El órgano colegial ha explicado que muchos ayuntamientos están recibiendo una carta de la directora general de Familia, Menores y Promoción Social, Silvia Valñana, en la que se les comunica que el número de profesionales que tienen en convenio con la Junta está por encima de la ratio aprobada por el Gobierno regional "y en consecuencia se les invita a que despidan a parte de la plantilla de servicios sociales que tienen a su cargo".
Esto supone, según el colegio, que se despedirán a algo más de un centenar de profesionales de 580 que quedan todavía en los centros sociales polivalentes, especialmente trabajadores sociales, "que se unirán a los más de 2.000 que el Gobierno de Cospedal ha echado en los dos últimos años".
Para el Colegio lo que la Consejería pretende con la carta remitida por la Directora General citada es despedir a buena parte de los únicos 269 Trabajadores Sociales de convenio supramunicipal o de plan concertado que todavía quedan en la red, a otra parte de los únicos 207 educadores sociales que también prestan servicios en estos centros y, por último, a los apenas 104 auxiliares administrativos repartidos entre ese millar de centros sociales polivalentes con los que cuanta la región.
Por tanto, a juicio de este Colegio Profesional, lo que la Consejería de Sanidad y Asuntos Sociales pretende "una vez más, es cargarse a buena parte de los 580 profesionales que todavía trabajan en los mil centros de servicios sociales existentes en la región, como si no fuera suficiente con las más de 2.000 que ya se han despedido en la red básica de atención en los dos últimos años".
Dos años de recortes brutales
Según los datos que maneja esta organización profesional el número total de personas que trabajaban en 2011 en los más del millar de Centros Sociales Polivalentes que existen en la región ascendían a 855 profesionales, entre trabajadores sociales, educadores sociales, animadores socioculturales, auxiliares administrativos, psicólogos, sociólogos y coordinadores de centros o programas, que venían atendiendo a 741.000 personas en los diversos programas de Servicios Sociales de Atención Primaria que entonces se desarrollaba.
Los trabajadores sociales de la región han constatado que entre 2012 y 2013 la Consejería ha despedido en la Red Básica de Servicios Sociales a 275 de los 855 profesionales que trabajaban en los programas sociales más básicos, lo que supone un 31,16% de la platilla existente tan solo hace 25 meses.
Todo ello sin contar al millar de personas de personas que trabajaban en programas de integración social y a unas 820 de las que prestaban el servicio de ayuda a domicilio gestionado por los ayuntamientos, y que en cierto modo también estaban incluidos en los servicios sociales básicos municipales.
Por categorías profesionales se ha despedido de los centros sociales polivalentes de la región en los dos últimos años a 46 trabajadores sociales (casi 200 localidades de la región continúan sin este ni ningún otro profesional), 33 auxiliares administrativos, 28 educadores sociales, 105 animadores socioculturales, un sociólogo, 32 psicólogos y 31 coordinadores de centro o programas. Estas cuatro categorías profesionales han desaparecido totalmente de los centros sociales polivalentes en los dos últimos años.
Cuesta más cuatro residencias que toda la red básica de servicios sociales
Para esta organización profesional cuestan más dinero cuatro residencias propias de la Junta que atienden a poco más de 710 personas mayores y tienen más de 800 profesionales que 1.004 centros sociales polivalentes que en 2010 atendieron 741.010 personas (uno de cada tres castellano manchegos), según la memoria del Plan Concertado del Ministerio, que cuestan ahora en 2014 (con los recortes de los últimos tres años) 10.654.140 euros.
"Una cantidad absolutamente ridícula si se tiene en cuenta la misión que tienen encomendada", según el colegio.
La bajada del presupuesto para profesionales de estos centros ha caído entre 2013 y 2014 un 22,19%, algo más de tres millones de euros.
Compasión por los que más sufren la crisis
"Es por lo anterior y por muchas cosas más por las que este Colegio Profesional pide "un poco más de generosidad, compasión, sentido común y sensibilidad con esos niños y familias que tienen graves dificultades para comer adecuadamente, vestir, no pasar frío, pagar las facturas domésticas o acceder a materiales escolares", se asegura en el comunicado..
También pide que no se reduzca la atención que se presta a esos hogares que están al borde del desahucio y/o ya han sido desahuciados por hipoteca o por alquiler; "con esas personas de clase media que hace unos años tenían una vida absolutamente normal y que ahora están más cerca de un contenedor de basura que de encontrar un trabajo medio digno; con esos jóvenes y no tan jóvenes que anhelan tener un trabajo cómo, dónde y por el dinero que sea; con esos hombres y mujeres que tienen que recurrir a la mendicidad, la limosna y la delincuencia porque sus familias ya no les pueden ayudar y la Junta tampoco lo hace".
Asimismo, el colegio que la red básica de servicios sociales atiende también a personas con discapacidad, enfermedad mental o patologías crónicas a las que se les está dando la espalda desde casi todas partes y a las que cada día se les pone todo un poco más difícil; "y por supuesto, con esas decenas de miles de personas mayores, dependientes o no, con las que la Consejería de Sanidad y Asuntos Sociales y otras instituciones pública hacen poco más que aplicarles unos recortes tras otros, una desatención tras otra, un olvido tras otro".
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