Querido papá,
Hoy me veo con la necesidad de escribirte... tengo 24 años, soy la mayor de los tres hermanos, todos mayores de edad, pero aun yo siendo la mayor parezco la menor, incluso parece, que soy una niña, por lo tanto no tengo el derecho de la mujer... Mis hermanos cuidan de mi, mis hermanos mas pequeños, tomán decisiones, que solo yo debería elegir, aun mas, cuando se trata de mi propia persona.
Cierto tengo una discapacidad física, pero en cuestiones de decisión, estoy tan cualificada como tu, y tu lo sabes... bien me apoyaste, con mi carrera universitaria, bien me apoyaste con mi trabajo, siempre me habéis educado para ser una mujer independiente y no discapacitada.... ¿entonces? ¿por qué niegas mi derecho, mi necesidad sexual?
Soy mujer, soy humana, y tengo necesidad sexual, algo crecida me llegó pero como a todos me llegó... y sabes me gusta un chico, yo se que yo a él también, pero jamás podré saberlo con seguridad mientras me tengas encadenada sexualmente hablando...
Se que tu como padre, me tienes que proteger de los posibles agresores, pero una cosa es protección y otro prohibición de algo que no se puede prohibir, como una necesidad humana, como la necesidad sexual, no temas, no me pasará nada, le conozco bien, no soy tan idiota de irme con el primer degenerado que pase... es un chico estupendo me cuidara y respetara... ¿no me crees? Permíteme que le invite a casa, conócele y ten una charla con él... ambos cuidaremos de ese acto, tomaremos precauciones, para no tener un embarazo no deseado... si quiero ser mama, pero aun no, me gusta mucho este chico, lo necesito a mi lado como más que un amigo... necesito mucho más que el sexo, necesito darle la mano, pasear junto a él, abrazarle, besarle, dar amor y sentirme amada.... ya no soy una niña, ni siquiera soy adolescente, soy joven soy mujer, necesito llego esta etapa de mi vida... por más que intentes impedirmela, no se va ir... necesito vivirla, porque como toda mujer, es lo que toca es lo normal... por favor papá entiéndolo... dame la oportunidad de disfrutar de vivir mi sexualidad. Si mis hermanos pequeños no han tenido prohibición ninguna ¿por qué yo si? A mi no me parece justo... ¿y a ti?
Te lo pido por favor piénsalo... tu hija aun te necesita y sobretodo te ama, eso jamás cambiara, pero como mujer, ya tengo ya necesito otra prioridad. Te quiero y siempre te querré papá.
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