domingo, 21 de abril de 2013

La falta de monitor podría obligar a una niña minusválida a abandonar su colegio


Los padres han convocado una manifestación para el próximo lunes para que Rocío, de cinco años, continúe el curso en el CEIP Alameda 

20.04.13 - 01:12 - 
La falta de monitor podría obligar a una niña minusválida a abandonar su colegio
Este lunes, Jesús Rodríguez y Priscila Pinto, padres de la pequeña Rocío de cinco años, han convocado a las nueve menos cuarto de la mañana una concentración a las puertas del CEIP Alameda «para luchar por el derecho de una menor a seguir recibiendo su educación escolar y evitar que la expulsen del colegio por estar enferma», explicaron.
Rocío sufre la enfermedad de Perthes, una necrosis del hueso de la cadera que le detectaron en septiembre, y desde hace unas dos semanas tiene puesta una férula de Alaska en sus piernas para mantenerla en su sitio, con la que deberá convivir hasta que la operen dentro de dos años para implantarle una prótesis con la que poder andar.
Ya, en el proceso de diagnostico de la enfermedad, la menor perdió el primer trimestre de curso, según cuenta su madre, «y cuando se incorporó en enero con una sillita de ruedas, solo la dejaban estar de nueve a once y media porque los profesores decían que no la podían llevar al patio». Tras esta nueva evolución en su enfermedad, Priscila y la directora del colegio acordaron que siguiera asistiendo a clase normalmente «pero al cabo de una semana nos dijeron que no podían seguir encargándose de acompañar a Rocío al cuarto de baño o al recreo y estar pendientes de la férula».
Cambio a un centro adaptado
Coincidiendo ese mismo día los padres con los inspectores de educación en el colegio, éstos les plantearon el problema «y nos dijeron que lo estudiarían, pero que lo más seguro sería un cambio a un centro con monitores para estos casos, que no hay dinero para contratar a nadie en el Alameda».
Ante esta situación, Priscila y Jesús explicaron que esta opción «afectaría a su otra hija de siete años, hiperactividad con déficit de atención, porque también tendría que llegar a un colegio nuevo, ahora que se ha adaptado a este entorno, profesores y compañeros y le va bien con los estudios».
Así las cosas, esta familia chiclanera espera el lunes contar con un amplio respaldo del ampa, padres y madres de los compañeros de sus hijas, algunos profesores, amigos, la Asociación de Parados y representantes de algunos partidos políticos «para lograr una solución que no perjudique a ninguna niña».

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