Accesibilidad postergada

Una encuesta promovida por Vigalicia (asociación gallega de asistencia personal y vida independiente) revela que sólo el 48% de las personas con movilidad reducida utiliza, no sin dificultades, autobuses urbanos o interurbanos.

 

El 52% restante no emplea este medio público de transporte, fundamentalmente por problemas de accesibilidad en los vehículos, las estaciones y las paradas intermedias. Más del 80% de los usuarios que han participado en el estudio apuntan problemas en los vehículos: casi el 70% declaran que los autobuses carecen de rampa automática o plataforma elevadora para permitir el acceso autónomo, existen pero están estropeadas (10%), o el personal de la empresa se niega a activarlas (3%).

Más del 65% señala además problemas externos: el 38% refiere que el mobiliario urbano de la parada impide el acceso y un 28% apunta que coches mal estacionados bloquean el camino hasta el autobús. Todo ello, indica Anxela López Leiceaga, presidenta de Vigalicia, “a pesar de ter normativa que nos ampara”.