Orgullosa de ser trabajadora social, de creerme mi
profesión, de ser voz de quienes no pueden defenderse, de
ser generadora de cambios, de defender la justicia social.
Feliz en Novelda con más de mil familias que tienen
personas esituación de dependencia a su cargo y que me
apoyan y han apoyado desde hace casi 8 años en esta
lucha. NO VAMOS A CALLAR ANTE LEYES GENOCIDAS.
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