viernes, 21 de marzo de 2014

Rubén se moja, Educación se lava las manos

La Dirección Provincial no ha solucionado la escolarización del niño con síndrome de Down que lleva tres cursos sin cole.

  • Rubén Calleja Loma, ayer en la piscina de Asprona con su terapeuta y maestra de educación especial, Marta Roy. - bruno moreno
    Rubén Calleja Loma, ayer en la piscina de Asprona con su terapeuta y maestra de educación especial, Marta Roy. - bruno moreno
ana gaitero | león 21/03/2014
Rubén sigue sin cole, pero muy ocupado. Un mes y una semana después de que la directora general de Formación del Profesorado e Innovación Educativa, Pilar González, se comprometiera a desatascar el caso, en León todavía no se ha buscado una solución.
El niño sigue con sus ocupaciones habituales y el padre y la madre, imputados por abandono familiar. «Que a esto le llamen abandono familiar...», afirma la madre, Lucía Loma, mientras el chaval disfruta en su sesión de piscina terapéutica.
A Rubén siempre le ha gustado el agua, así que ir a la piscina es «un premio». Marta Roy, maestra de educación especial y monitora de natación para actividad acuática adaptada, realiza una sesión semanal en la piscina del centro de Asprona en Armunia. «El primer objetivo es mejorar su estado físico, su tono muscular, su espalda y adaptar el estilo de nado a su situación», explica la terapeuta. «El servicio lo pagamos, pero al ser un convenio de Asprona con Amidown nos sale algo más barato», comenta la madre de Rubén.
Hoy, Día Mundial del Síndrome de Down, la familia de Rubén estaba citada a una reunión en la Dirección Provincial de Educación para avanzar en las propuestas de una y otra parte. Según Alejandro Calleja, padre de Rubén, «nos dijeron que tenían problemas de agenda y la han suspendido».
El niño cumplirá 15 años en agosto y es su tercer curso sin ir a la escuela. La familia tomó la decisión de no escolarizarlo en el colegio especial Sagrado Corazón donde fue matriculado de oficio por Educación tras el dictámen de dos orientadoras que, recuerda el padre, «nunca llegó a firmar el jefe de los equipos de orientación».
El padre del menor sostiene que la segregación escolar de Rubén es una «condena a muerte social» porque en un colegio especial «Rubén está con el 2% de la población y alejado del 98%».
La Defensora del Pueblo, Soledad Becerril, acaba de hacer varias recomendaciones para que la Lomce respete los principios de inclusión de la Convención de Derechos de las Personas con Discapacidad. «La escolarización en centros ordinarios debería ser la norma, mientras que la escolarización forzada de alumnos con discapacidad en centros de educación especial debería tener carácter excepcional», señala en un comunicado.
#Inclúyete
Down España, que ha prestado su apoyo a Rubén para lograr su educación inclusiva, celebra hoy el Día Mundial del Síndrome de Down con la campaña #inclúyete mediante la que invita a la sociedad a «incluirse» e inmiscuirse en la integración de las personas con síndrome de Down. Rubén se moja, mientras Educación se lava las manos.

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