Impiden viajar en el mismo tren Alvia con sus sillas a una pareja de discapacitados

El matrimonio quiere ir a Barcelona y Renfe quiere mandarle en dos convoyes

EMILIO ZUNZUNEGI - Sábado, 14 de Mayo de 2016 - Actualizado a las 06:03h

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Roberto y Zuberoa, ayer en una calle de Sestao

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SESTAO - Si no fuera porque ataca a la dignidad y el respeto hacia dos discapacitados, la postura de empresas de transporte como Alsa y sobre todo Renfe para con algunos de sus viajeros es cuando menos risible, aunque reprobable. Y si no que se lo pregunten a Roberto López y su pareja, Zuberoa Liendo, dos discapacitados de Sestao postrados en silla de ruedas que han contratado un crucero en barco por el Mediterráneo con un año de antelación -para asegurarse un camarote adaptado-, y que se están encontrando con todo tipo de trabas para llegar a su punto de embarque en Barcelona. Puede sonar a chiste pero frases como “suban ustedes a pie al autobús y nosotros les llevamos las sillas en el maletero” o “en este tren solo hay una plaza para sillas de discapacitados, así que uno de los dos tendrá que coger otro tren”, son algunas de las perlas que han tenido que oír en su intento por cerrar su viaje a la Ciudad Condal en setiembre cuando partirá, el día 19, su barco.

DENUNCIA “Se te queda cara de tonto cuando pides explicaciones”, relata Roberto, quien ha puesto el tema en conocimiento tanto de la asociación de discapacitados sestaoarra Afises como de la coordinadora Fekoor para denunciar el trato discriminatorio que están sufriendo en este tipo de transporte. “Incluso nos hemos planteado la posibilidad de ir a Barcelona en avión pero, aparte del sobrecoste del viaje -ya que como discapacitados con un grado importante tenemos derecho a la tarjeta dorada de Renfe que supone un importante ahorro- las sillas deberían viajar en la bodega de carga del avión junto con el equipaje y eso no nos convence mucho porque pueden resultar averiadas”.

Para Roberto es inaudito que en pleno siglo XXI trenes como el Alvia “todo un dechado de tecnología, no sea capaz de ofertar más de una plaza en su convoy. Puedo entender que haya un número limitado de plazas, pero no es de recibo que solo se oferte una plaza, cuando no creo que sea tan difícil habilitar más anclajes para sillas de ruedas”, reseña este vendedor de la ONCE, quien confía en que Renfe -el viaje más barato para la pareja- pueda acercarles a Barcelona antes de que parta su crucero.