martes, 15 de julio de 2014

Las ayudas del Gobierno de Cospedal para integración social, "son limosnas que llegan tarde y mal"

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La presidenta de Cospedal, entre el consejero de Sanidad y Asuntos Sociales, José Ignacio Echániz, y el portavoz del Gobierno regional, Leandro Esteban.La presidenta de Cospedal, entre el consejero de Sanidad y Asuntos Sociales, José Ignacio Echániz, y el portavoz del Gobierno regional, Leandro Esteban.
El Colegio Oficial de Trabajo Social de la región califica las ayudas del Gobierno de Cospedal para la integración social de "limosnas que llegan tarde y mal" tras publicarse en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha este lunes, a menos de cinco meses de acabarse el año la convocatoria oficial de estas subvenciones destinada a entidades públicas y sociales.
El Colegio que representa a los trabajadores sociales de Castilla-La Manchal lamenta el despropósito con el que el Gobierno regional ha hecho la convocatoria pública de estas ayudas de la Junta, destinadas a luchar contra la pobreza, el riesgo, la vulnerabilidad y la exclusión social en la comunidad autónoma.
"Sale muy tarde (debería llevar resuelta entre siete y diez meses), muy mal (la mayoría de los proyectos de integración social deberían haber comenzado el 1 de enero de 2014, no dejando casi nada de margen de maniobra a muchas entidades públicas y sociales que quieran concurrir), sin plazos (solo se dan 10 días para presentar solicitudes de proyectos complejos) y sin apenas dinero (su presupuesto para 2014 es de 2,9 millones, un 83% menos que en 2011, que fue de 17,8 millones)".
Este Colegio profesional pide a la Junta que no retrase tanto la publicación de las órdenes de convocatoria de subvenciones recogidas en los Presupuestos Generales de la Junta en general y de las relacionadas con la pobreza y la exclusión en particular.
"Eso da lugar a que no haya tiempo material para desarrollar los proyectos y que muchas entidades tengan que renunciar a todo o parte del dinero concedido, lo que conlleva que no se atienda a las personas y familias que se iba a atender y que no puedan trabajar tampoco los profesionales que iban a desarrollar los proyectos aprobados", se precisa en la nota.
En el caso concreto de esta convocatoria, el Colegio señala que "después de muchos meses del borrador de la convocatoria por los cajones y despachos de la Consejería, sale ahora, tan sumamente tarde, en pleno verano, casi en agosto, con muchas entidades cerradas por vacaciones, dando tan solo diez días para presentar solicitudes y para elaborar documentos complejos...un cumulo de despropósitos, uno tras otro".
A juicio del Colegio, "lo más lamentable es que una vez acabado el plazo de presentación de solicitudes, la Administración no tiene obligación de resolver hasta pasados tres meses, lo que implica que nos metemos como poco a finales de octubre...situación que no deja ningún margen de maniobra a las entidades finalmente beneficiarias para realizar los proyectos aprobados y contratar a los profesionales correspondientes, por lo cual no se les paga parte o toda la subvención concedida, o tienen que devolver parte o todo de lo ya pagado...".

Renunciar a casi todo
Para esta organización profesional "lo más indignane es que se vende que se han distribuido casi tres millones de euros entre entidades diversas para integrar a las personas, grupos, familias y barrios más excluidos, cuando luego no es cierto, pues las entidades han tenido que renunciar a todo o parte de la subvención porque no tenían tiempo de hacer casi nada por lo tarde que se convoca y resuelve la convocatoria. Pero esto no ocurre solo con esta convocatoria, también con otras muchas de la Consejería".
Desde esta corporación de derecho público también se denuncia el miserable presupuesto de esta orden de convocatoria: "más de cuatro veces inferior a lo que se destinaba en 2011 y con el triple de personas y familias en situación de riesgo de pobreza y/o exclusión social que a comienzo de la crisis".
Para los responsables de esta organización profesional "los despidos masivos de profesionales de la Administración y de entidades sociales junto con los recortes en todos los servicios sociales han convertido a nuestra región en la más pobre de España y en la que menos se ayuda a las familias, en la cuarta con más paro, en la segunda con más embargos y desahucios, en la que más parados de larga duración tiene, en la cabeza de las que más paro juvenil genera, en la primera que más servicios sociales ha recortado en tres años, en la que más ha subido la pobreza...".
Respecto al presupuesto consignado a esta convocatoria este colegio profesional se hace el siguiente planteamiento: "Si oficialmente hay 247.311 hogares en situación de pobreza o exclusión social o ambas, como es posible que solo se destinen desde la Junta 12,10 euros de media para cada una de esas casi 250.000 familias para intentar sacarles de la situación de pobreza, riesgo extremo, vulnerabilidad o exclusión en la que se encuentran y cada vez se complica más".
Finalmente, los trabajadores sociales señalan a la Junta las tres recetas básicas si realmente se quiere luchar o corregir mínimamente la pobreza y la exclusión social existente en la región.
"Primero, multiplicar por diez el importe de nuestras rentas mínimas de inserción (el ingreso mínimo de solidaridad, mientras se regula y desarrollar la Renta Básica regional); segundo, multiplicar por veinte el importe de las ayudas de emergencia social (salvarían de muchos desahucios, de falta de ropa, cortes de suministros, desnutriciones...); y tercero, quintuplicar el importe de estos programas de integración social (que además de traer miles de puestos de trabajo profesionales rebajaría con toda seguridad la pobreza, el riesgo, el desamparo y la exclusión social de Castilla- La Mancha".

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