Ya no solo se trata de hablar de lo que se llevan unos y lo que quitan a otros. Se trata de hablar de humanidad. Se trata de hablar de sentimientos que llevan la mayoría de las personas y que nos han llevado a la situación actual. Indiferencia, hipocresía, falsedad, avaricia, dejadez, y muchos más. Parece mentira pero es así. Desde el ciudadano de a pié hasta el Rey. ¿Cómo si no se explica que en un país como este la gente se muera de hambre y de abandono? El enriquecimiento fraudulento de muchos está causando la pobreza de muchos más y lo consentimos. ¿Por qué? Por mirar para otro lado pensando que no nos va a pasar a todos. Y como sigamos así no se salva ni el tato. Nada más los que han aprendido que la justicia de este país está para el pobre, para el chorizo, para el pringao. La casa Real está podrida de dinero y seguimos dándoles más. La iglesia está podrida de dinero y seguimos dándoles más. Los bancos y banquero están podridos de dinero y seguimos dándoles más. ¿Sigo? No hace falta. Cuántas veces se habrá puesto en facebook y seguimos igual. Pues nada. Sigamos igual.
Luego están los que podrían poner su granito de arena para por lo menos que los que no se pueden hacer escuchar tengan algún cauce para denunciar que ni si quiera les dejan la dignidad. Pues no hacen nada. Los medios de comunicación no se hacen eco del sufrimiento que están pasando los dependientes, enfermos, niños y ancianos. O si. Pero parece que esperan a que haya más desesperación para darle más sensancionalismo al tema. Los partidos políticos de la oposición hablan de que el PP nos quita nuestros derechos pero no hace nada por denunciar el abandono y la desmantelación de la ley de la dependencia. ¿Es que la gente se cree que es un privilegio o un sueldo gratis? Es ahí cuando entra la ignorancia de los responsables que miran para otro lado. Ignorancia y posterior hipocresía. Esos que se paran para hacer una caricia a un niño con parálisis cerebral para hacerse la foto pero que después se miran rápidamente la mano por si les ha quedado un poco de baba, no vaya a ser contagioso. De eso he visto y he vivido. Y con este ejemplo quiero recordar y preguntar...¿Alguien se acuerda de aquel niño que en el senado le mandó un besito a la Princesa Leticia? Pues claro que no. Ya lo dije en su momento. Quedó precioso en todos los telediarios, en los programas del corazón, en las revistas sensacionalistas. Pues que sepáis que se morirá. Se morirá porque han robado el dinero para investigar su enfermedad, entre otras cosas. Pero que bien quedó. Hipocresía. Nos alimentamos de una hipocresía diaria que abunda en el aire que respiramos. Estoy de derechas, izquierdas, centros y la madres que los parió........ Pero que le vamos ha hacer. Esto es España. Un país de ladrones y sinvergüenzas lleno de señoritos y de curritos. Curritos que ven más importante que no les quiten el fútbol de pago a que nuestros hijos y nietos puedan algún día tener una calidad de vida digna, sean autonomos, productivos o no. Solo seres humanos con derechos y deberes. No solo con deberes para enriquecer a una minoría que tiene al pueblo acojonado, y todavía me pregunto por qué. Espero que llegue el día en que todos no tengamos nada que perder para que reaccionemos como debemos. Con dignidad y lucha. Por ahora, sigamos mirando para otro lado.
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